Los objetivos del plan anunciado hoy por el Gobierno de Navarra son incrementar el consumo final de energía procedente de biomasa en un 28 % hasta 2020 y crear 1.650 puestos de trabajo. Para lograrlos se crea una comisión mixta formada por representantes de la administración, del Cener, de la Federación Navarra de Municipios y Concejos y de las industrias forestales, instaladoras y de producción de biocombustibles. Dicha comisión impulsará tres tipos de acciones, dos de ellas orientadas al incremento de la oferta y la demanda y una tercera de carácter transversal (investigación, formación, divulgación, etcétera).

Juan Luis Sánchez de Muniaín, vicepresidente segundo del Gobierno de Navarra, y José Javier Esparza, consejero de Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Administración Local, han presentado hoy las acciones a desarrollar para impulsar la biomasa forestal como “sector de dinamización de la economía y el empleo, fundamentalmente en el ámbito local”. En los últimos meses, otras comunidades autónomas (Cantabria, Castilla y León, Andalucía, Extremadura, Cataluña y la Comunidad Valenciana) habían dado pasos similares, por lo que Navarra se une así a una corriente creciente que intenta explotar las vertientes socio-laborales, económicas y ambientales que presenta la biomasa forestal, especialmente en el ámbito energético.
Hasta 2020, y con el aprovechamiento de recursos forestales propios, está previsto que las acciones que se pongan en marcha faciliten la creación de unos 1.650 puestos de trabajo directos e indirectos. Esto supone un incremento de casi el 40 % con respecto a los empleos actuales, que rondan los 4.000 y se reparten entre 300 empresas de explotación forestal, serrerías, embalajes, almacenes y centros de fabricación. “En términos energéticos, se prevé incrementar de forma notable durante esta década la cuota de la biomasa en el consumo final de energía, pasando del 3,9 % de 2010 al 5% en 2020, esto es, en un 28 %”, añadieron los responsables del Gobierno de Navarra.
Según estas mismas fuentes dichas previsiones, conforme al III Plan Energético de Navarra horizonte 2020 y el Plan Moderna, pretenden contribuir a “potenciar la economía verde afianzando el liderazgo de Navarra en las energías renovables y convirtiéndola también en un referente en el campo de las eficiencia energética”.
Prioridad a la biomasa en la renovación de instalaciones térmicas del Gobierno Foral
Para la consecución de los objetivos previstos, el Gobierno de Navarra ha aprobado la creación de una comisión mixta.
Hasta 2020, y con el aprovechamiento de recursos forestales propios, está previsto que las acciones que se pongan en marcha faciliten la creación de unos 1.650 puestos de trabajo directos e indirectos. Esto supone un incremento de casi el 40 % con respecto a los empleos actuales, que rondan los 4.000 y se reparten entre 300 empresas de explotación forestal, serrerías, embalajes, almacenes y centros de fabricación. “En términos energéticos, se prevé incrementar de forma notable durante esta década la cuota de la biomasa en el consumo final de energía, pasando del 3,9 % de 2010 al 5% en 2020, esto es, en un 28 %”, añadieron los responsables del Gobierno de Navarra.
Según estas mismas fuentes dichas previsiones, conforme al III Plan Energético de Navarra horizonte 2020 y el Plan Moderna, pretenden contribuir a “potenciar la economía verde afianzando el liderazgo de Navarra en las energías renovables y convirtiéndola también en un referente en el campo de las eficiencia energética”.
Prioridad a la biomasa en la renovación de instalaciones térmicas del Gobierno Foral
Para la consecución de los objetivos previstos, el Gobierno de Navarra ha aprobado la creación de una comisión mixta.